Reconozco que ultimamente estoy bastante vaga, pero es que con estos calores estivales, lo último que apetece es estar delante del ordenador. Pero bueno, haré un pequeño esfuerzo, ya que la ocasión lo merece.Llevo unos días un tanto triste, ya que me he enterado de que Paul Newman, aquejado de un cancer de pulmón terminal, espera serenamente la muerte en su casa rodeado de los suyos.
Siempre he sentido admiración por este actor, en un principio me llamó la atención su físico... esos ojos azules!... Muchas de sus películas siempre han estado entre mis favoritas: "El largo y cálido verano", "Cortina Rasgada","El Premio", "Dos hombres y un destino", "El Golpe", Veredicto Final"... Pero con el tiempo empecé a admirar también su modo de ser y de entender la vida, compaginando su trayectoria en el cine, con su afición por las carreras de coches y su ayuda a diversas asociaciones benéficas.
En 1982 fundó la compañía de alimentos Newman's Own, que fabrica salsas para ensaladas y cuyos ingresos son destinados a diferentes obras de caridad. Una de ellas los campamentos de verano para niños con enfermedades terminales, donde utilizan la diversión y la sonrisa como medicina: "The Hole in the Wall Gang Camp". Ya antes, tras la muerte de su hijo por una sobredosis, había creado la "Scott Newman Foundation", que patrocinaba películas y programas de televisión para abordar problemas relacionados con la adicción a la droga y al alcohol.
Queda mas que claro que ha tenido siempre gran conciencia social y ha sabido aprovechar como pocos su situación privilegiada para ayudar a los mas desfavorecidos y necesitados.
Se apaga una de las mas grandes estrellas del cine y una gran persona, pero Paul Newman nunca morirá del todo. Mientras lo recordemos y lo llevemos en nuestros corazones, siempre brillará su estrella allá en lo mas alto.
