El Señor de los Anillos

La trilogía de "El señor de los anillos" marcó una época en mi vida. Un grupo de amigas y yo, fans tanto de los libros de J.R.Tolkien como de las películas de Peter Jackson, esperábamos con impaciencia cada año, como un ritual, el estreno de cada una de las entregas y solíamos ir a verlas ilusionadas como un niño, el día del estreno, siempre por fechas prenavideñas.
Cada una de las películas, "La Comunidad del Anillo", "Las dos Torres" y "El retorno del Rey", nunca nos defraudaron, cosa casi imposible en una adaptación literaria, donde demasiadas veces el guionista pone y quita por su cuenta, estropeando el resultado final de la película. Por ponerle un pero, en ocasiones eché de menos alguna escena de los libros, importante para mí, que no apareció en el film, pero reconozco que hubiera sido imposible una adaptación al pie de la letra de unos libros tan densos.
Cuando acabó la trilogia, como homenaje de despedida, se nos ocurrió hacer un domingo lo que llamamos "El Maratón del Anillo". Y Mila y yo nos plantamos en casa de Elena y Manuela, a las 10 de la mañana y una tras otra, fuimos viendo las tres películas (en versión extendida además) haciendo solo un parón para comer. El maratón acabó a las 11 de la noche y nos dejó agotadas, pero con la bonita sensación de haber formado parte de esa comunidad fantástica, ideada por Tolkien hace cincuenta y tantos años.
Se anuncia el rodaje de "El Hobbit", seria una buena idea que nos volviésemos a reunir para acudir a su estreno, con la misma ilusión de hace 7 años.
Otro día haré un comentario sobre Viggo Mortensen, que se merece sección especial.